La contaminación del medio ambiental es un problema que,
como tal debe ser enfrentado por los estados que efectos
de encontrarles una solución aceptable, definitiva y
razonable.
Ahora bien ¿cómo se están comportado los mismos al
respecto? según mi percepción,
las políticas implementadas a la fecha, dejan bastante que desear,
pues no han tomado nota que la solución cual una peste
degrada ríos, cordilleras, selvas, mares, que son todo uno sin
respetar ningún tipo de frontera. No obstante, aun se escuchan voces
de importantes dirigentes, algunos con funciones ejecutivas, excusándolo ¿escudándose? en el
criterio de la soberbia nacional. Como si el cambio climático no
hubiese jaqueado ese criterio, exigiendo para ya
la elaboración de tácticas, estratégicas y acciones
comunes.
Ningún estado nacional se
encuentra en condiciones de combatir con el éxito los fenómenos de
por ejemplo deforestación que hoy día se producen como efecto
directo del calentamiento global de la tierra.
Si bien las relaciones se encuentra estructuradas en
la teoría del poder por la que las fronteras nacionales
son inviolables y la soberanía del poder por la que las
fronteras. Nacionales son inviolables y la soberbia es absoluta no se puede
decir lo mismo de las consecuencias de políticas públicas incorrectamente
ejecutadas, como las referidas al medio ambiente,
cuyas consecuencias exceden el ámbito nacional y
regional, hasta, presentar implicaciones globales.
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